La Invocación al pico de forma: Nudo gordiano para valientes responsables.

Por Pedro Gómez (pedrogomez7@hotmail.com)
“Quien daña el saber, homicida es de sí mismo”.Calderón de la Barca.

Con perdón pero…. cuando  a la terquedad de nuestros prejuicios le añadimos la gratuidad y facilidad inconsecuente de expresarlos, nuestros discursos, alejados de la realidad opinada, se repletan de insustanciales argumentos, cuyo objetivo, más allá del mero arte de informar/enseñar, se transforma en un vil acto destructivo, no ya de los profesionales implicados (normalmente preparados para estas vicisitudes), sino de lo que es más grave…. del propio saber.
Y es que hablar de fútbol, opinar desde la lejanía sobre aquello que le rodea… ¡Claro que es un derecho!, inviolable e inherente al tinglado de este juego, pero al que entre todos,  hemos arrancado su vestimenta de credibilidad a base de estirones de irresponsabilidad e inoportunos empujones de reivindicación…..donde se exige, pero no se está dispuesto a escuchar y aprender sobre aquello que se opina.
Si exijo un aumento de suelto a mi jefe…¿No sería lo responsable estar dispuesto a mejorar mi desempeño? , entonces… si exijo a mi equipo jugar bien al fútbol y que este en una forma física óptima al final de temporada..¿no debería  en primer lugar preocuparme por conocer las complejas connotaciones que ello conlleva? ¡yo creo que sí!, sentido de la responsabilidad personal y profesional, nada del otro mundo, si me atrevo a levantar la voz, que no me descomponga si me exigen saber de lo que hablo…¿o es que opinar y reivindicarse no deben exigir ciertas retribuciones en compensación?..upss….. perdón…..que hablamos de fútbol…y aquí todo vale y todo el mundo sabe.


Dicho esto,  y teniendo en cuenta que el pico de forma es al final de temporada futbolística lo que Belén Esteban o Paquirrin a Telecinco, no sería responsabilidad profesional por mi parte eludir ciertos debates en torno a la problemática tan habitualmente despertada en estas semanas finales de campeonato, donde todo el mundo habla de estados físicos alcanzados, picos máximos de rendimiento y equipos que agotaron sus reservas por una mala gestión y planificación de los esfuerzos precedentes.
Así, este molesto pico de forma, cual nudo gordiano de dificultad previsiblemente irresoluble, se presenta en mi contexto como  una “desconocida” realidad multidimensional, donde parece que no solo suma el aspecto físico, sino que aspectos como el comportamiento colectivo, el desempeño posicional, la gestión emocional del entorno, la solidez futbolística del rival…aun condicionando el buen hacer de mi equipo, no parecen decantar las oportunistas opiniones al respecto, limitándose estas a argumentos tan simplistas como el equipo no tiene gasolina (si las sensaciones fueron malas) o el equipo vuela (si se ganó con solvencia).
Señores, seamos serios…después de 300 sesiones aproximadas de entrenamiento, al menos 40 partidos de competición…¿Qué equipo puede no estar adaptado a la especificidad de este esfuerzo?, ¿Qué desadaptación física que no sea un proceso lesivo puede darse en estos momentos que impida competir a mis jugadores?, ¿Cómo pueden los equipos “perdedores” en dos semanas optimizar este supuesto mal estado físico actual (sí, los que ganan casi nunca se encuentran mal físicamente)?, ¿Qué se puede hacer en una semana que sea capaz de modificar la tendencia “física” heredada de 10 meses anteriores?, ¿No será que la irresponsabilidad, y por ende el desconocimiento, vuelve a contaminar nuestros argumentos?, ¿No será que hablamos de “estado físico” omitiendo sus condicionantes?.
Si el octanaje de esta gasolina no puede entenderse sin hablar de relaciones futbolísticas y emocionales del equipo….¿cómo queremos deshacer este nudo mirando únicamente al preparador físico?, ¿cómo diantres queremos abordar su resolución sin ampliar nuestro abanico de respuestas?.
1315947611 0 La Invocación al pico de forma: Nudo gordiano para valientes responsables.
Estimados compañeros, ¡ánimo!… cuando estas semanas aquellos que no tengáis la suerte de alcanzar los objetivos seáis criticados, no os abandonéis a la irresponsabilidad del desconocimiento y pongáis en duda el seguir buscando fuentes de energía alternativas a la tan contaminante “gasolina”…me consta que distintas vías energéticas alternativas nos esperan (emocional, futbolística…).
No esquivemos responsabilidades…¡pero que la manada no nos contagie!.
Entre tanto, confiemos en que algún nocturno tertuliano se haga eco de estas líneas u otras similares, y se decida  a abandonar la irresponsabilidad de algunas de sus opiniones.
¡Dichoso nudo de forma!

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