Y ya hablando de fútbol, lo cierto es que es un lujo ver a éste equipo, tanto dentro del terreno de juego como en la grada. El fútbol combinativo que Vidakovic impone a sus equipos da gusto verlo en la 2ªB, la apuesta por tener el balón y los jugadores acordes para ello es digno de ver. Y si dentro del campo son un lujo, en la grada no se quedan atrás. Si en su campo son especiales, fuera de casa y ante desplazamientos cercanos a Cádiz como es Estepona, la afición les respalda efusivamente y eso si, estos no tienen verguenza de llevar su camiseta amarilla, el cadismo es un sentimiento y ellos lo expresan con sus colores y sus cánticos. No se queda atrás la afición del Estepona, sobretodo el Frente Libertario que anima y canta sin parar, hacen ameno y más divertido este espectáculo.
A la entrada del estadio, la marea amarilla ya se hacía notar, y el primer pensamiento que se me vino a la cabeza era ese, el sentimiento de vestir de amarillo para esta gente, no se esconden ni se averguenzan de sus colores. Raro es ver a aficionados de otros equipos, asistir a ver a su equipo fuera de casa con los colores de su club, incluso hasta es raro verlo cuando nuestro equipo juega en casa, salvo los grandes, eso esta claro, ahí también marcan la diferencia. Para ellos, el Cádiz es lo primero y después el Madrid o el Barça, para muchas otras aficiones, lo primero es el Madrid, el Barça, el Málaga, el Sevilla, el Bilbao, ....y después el equipo de su ciudad o pueblo, otra gran diferencia con el cadismo. Envidia sana de ser de Cádiz.
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