El fútbol no entiende de lógica. Y es que ayer fui a ver uno de los que tenía más posibilidades de ser 4º del Grupo II de 2ªB y por consiguiente ser rival nuestro en la próxima eliminatoria. Sin embargo, el 1-1 les deja fuera, puesto que necesitaba una victoria "lógica" en su campo en un derby ante un Conquense que nada se jugaba. Ambiente de lujo, como viene siendo habitual en todos los campos que se juegan bastante a estas alturas de campeonato y conforme avanza el partido los nervios y la presión comienzan a salir a relucir, dentro y fuera del campo. Al final, de cara al futuro inminente de la liguilla, de poco nos sirvió el desplazamiento, aunque como siempre, hay que ver el lado positivo, más jugadores vistos, disfrute del paisaje, de la carne y del vino de esas maravillosas tierras y sobretodo de la mejor compañía que podía tener.
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